Esta semana pasada, los
sindicatos UGT y CCOO, convocamos en la mayoría de las localidades del estado
español, diferentes manifestaciones y concentraciones exigiendo EMPLEO Y
SALARIOS DIGNOS. Que aunque sea una frase corta, incluye muchos aspectos de
nuestra vida cotidiana, todos ellos relacionados con la DIGNIDAD.
El encarecimiento de la vida,
especialmente en lo relacionado con los servicios básicos (electricidad, gas,
calefacción…), ha generado que la pobreza
energética que afectaba a un cuarto de la población, ahora tras la subida
brutal del precio de la luz, afecte a muchísima más gente. Y mientras esperando
que ese famoso acuerdo sobre dicha pobreza energética se lleve a cabo. De todas
maneras, como siempre, no hay problema, nuestro presidente tiene la solución.
“Cuando llueva bajará el precio”, dijo. Los habitantes de Málaga, Granada y
compañía estarán contentos, les va a salir gratis. ¿Verdad que no? Pero es lo
que hay. De presidente digo. A continuación sale el ministro de energía, y nos
dice que tenemos que “acostumbrarnos a que suban los precios”. ¿MÁS AÚN?
Sinceramente, yo creo que en este país nos lo tenemos que hacer mirar. Que nos
gobiernen, estos personajes, y que además sean los que en intención de voto van
los primeros, es digno de una estudio sociológico de la ciudadanía. Porque, no
nos olvidemos que en su mano está la posibilidad de abaratar el precio de la
luz, ya que más de la mitad del precio final son impuestos, entre ellos el IVA,
el cual se aplica en su porcentaje máximo del 21% a pesar de ser un producto de
primera necesidad. Esto es INDIGNO.