A
la calle fue donde se echaron miles de españoles en todo el estado, y miles de
castellonenses en la capital de la provincia, el
pasado miércoles, para manifestarse en contra de las medidas impuestas por el
gobierno del Partido Popular en materia de Educación. Y más concretamente en lo
referente a frenar la aplicación de la reválida, cosa que se ha conseguido momentáneamente, ya que el
día siguiente de las manifestaciones, Mariano Rajoy anunció su paralización,
que no su eliminación. No ocurre lo mismo con la
Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Una ley contra la
que se han realizado varias huelgas y manifestaciones, por entender que ataca
al sistema educativo público y de calidad. No hay más que ver el recorte de
recursos públicos a la educación, pasando de aportar el 4,8% del PIB, al 3,9%, lo que representa del orden de 9.000
Millones de Euros menos, la eliminación de la asignatura de Educación para la
Ciudadanía, verdadera obsesión del PP. También recuperan acuerdos con centros que segregan al alumnado
por sexos. Los incrementos en las tasas universitarias (matrícula y créditos),
sin dejar de lado que cuando se aplique el “3+2” (que los grados de cuatro años
pasen a tres, y los máster de un año
pasen a dos), se incrementará sustancialmente los precios de todo ello y no
todos podrán acceder a su realización, volviendo a los tiempos en que sólo
podían estudiar los pudientes. Por cierto… la religión computa para hacer la
media. Hasta los ateos van a cogerla!!
Y
no hay que olvidarse del profesorado, un colectivo totalmente minusvalorado en
su trabajo docente, como muestra que no se valoraba la evaluación
continua, en vez de la reválida, la cual
tenía que realizar un tribunal externo. Se les modifican sus condiciones de
trabajo sin ninguna negociación, introduciendo la movilidad funcional y geográfica.
El director puede elegir al profesorado, y como hecho más grave, la pérdida de
competencias del Consell Escolar, por lo que no decidirá nada, quedando todo en
manos de los directores. Además, en la época del PP en la Comunidad Valenciana,
se eliminaron más de 5000 plazas de profesores, de los cuales en esta etapa se
han recuperado 2000, pero en la provincia aún faltan más de 800.
Por
supuesto, en todo lo apuntado anteriormente, me refiero al sector público.
Volviendo
al tema de la manifestación: quedó sobradamente demostrado, que cuando la gente defiende lo suyo, se puede
conseguir todo. El fatalismo en que habíamos caído, se tiene que desterrar.
Tenemos que manifestarnos siempre que creamos que están atentando contra
nuestros derechos, igual que hacemos continuamente desde UGT, casi siempre
conjuntamente con CCOO, como prueban las manifestaciones realizadas
recientemente contra el TTIP, CETA, el TISA, el Día del Trabajo Decente, en
defensa de las Pensiones, donde los mayores de UGT se desplazaron a Madrid, y
tantas otras manifestaciones en las que nos gustaría que la participación fuera
multitudinaria, ya que nos afecta a todos.
Fue
especialmente agradable, lógicamente por las causas de la manifestación, ver a
tanta gente joven participando. También gente mayor, porque como he dicho
afecta a todos, y el que no está en el Instituto o la Universidad, sí que pueden estar, sus hijos o nietos. Y
lógicamente, los chavales pueden pensar que a ellos no les afecta los Tratados
como el TTIP y demás, o las pensiones, pero se equivocan, les afecta y mucho,
porque estamos trabajando por su futuro, intentando que lo que sus padres y
abuelos consiguieron con mucho esfuerzo
y lucha, no se pierda lastimosamente sin hacer nada para intentar
evitarlo.
Por
todo lo anterior, os emplazo a la próxima manifestación, ya que sin saber de
que tratará, sí que sé una cosa: NOS AFECTA A TODOS.
Artículo de Opinión. Publicado en Mediterráneo
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