Castellón inicia el año 2013 con 3.235 personas desempleadas mas.
Los datos del paro del mes de enero de este año constatan que nuestra provincia sigue inmersa en una profunda crisis económica y de empleo, y que los datos de los últimos meses, en los que se redujo ligeramente la cifra de desempleados, no suponían un cambio de ciclo, sino un espejismo en la larga senda de destrucción de empleo que vive nuestra provincia desde el inicio de la crisis.
Este mes de enero el desempleo ha crecido en nuestra provincia un 5'21%, lo que significa que 3235 personas han pasado a engrosar la filas de desempleados que día a día colapsan las sedes del SERVEF. Aunque el paro se mantiene prácticamente estable en el sector industrial (-0'32%), en la construcción (-0'49%) y en el colectivo de desempleados sin empleo anterior (-0'82%), se incrementa de forma significativa en el sector agrícola (29'54%) y en el sector servicios (7'66%).
De los 3235 desempleados de este mes, 2733 pertenecen al sector servicios, que suma 38415 desempleados y desempleadas, cifra que en estos momentos supone ya el 58'85% del total de desempleados. Estos datos confirman la terrible situación de la economía provincial , marcada por una elevada caída del consumo privado que impide cualquier capacidad de reactivación económica y por lo tanto tiene un impacto negativo en la creación de empleo.
La política de recortes del gobierno del PP no solo esta afectando a la calidad de los servicios públicos, sino que está teniendo un efecto demoledor en la capacidad adquisitiva de las familias, que al disponer de menos recursos, ha reducido drásticamente su capacidad de consumo, lo cual tiene un impacto directo en el empleo en el sector servicios, y de forma indirecta en el resto de sectores. Así pues los datos del paro de este mes son consecuencia directa, entre otras medidas, de la eliminación de la paga extra a los empleados públicos de nuestro país.
Solo un cambio de rumbo en la política económica y de empleo del gobierno puede servir para que el conjunto del estado, y especialmente nuestra provincia, pueda volver a la senda de creación de empleo, sino es así los y las castellonenses les queda un largo camino de sufrimiento por la incapacidad del gobierno para plantar políticas que antepongan los intereses de los y las ciudadanas a los de los poderes fácticos y económicos. Lamentablemente las señales que llegan de gobierno del Estado y del Consell de la Generalitat valenciana no parecen indicar un cambio de rumbo, lo que a nuestro juicio solo nos puede llevar a un alargamiento de la actual situación de destrucción de empleo.
